Foiling Week. La vela ha alzado el vuelo.


Foiling Week. La vela ha alzado el vuelo.

“El foiling nació hace más de 100 años, alrededor de 1907, en una época muy cercana a la de los primeros vuelos de los hermanos Wright.
Fue una idea de Enrico Forlanini, pionero de la aeronáutica, que pensó en proporcionar a los pilotos de aquella época una herramienta para practicar y adiestrarse con un medio más seguro y lento, una especie de vuelo que se desarrollaría en el agua, sin el peligro de caer.

Esta pasión mía por el foiling nace de la experiencia. La Foiling Week es un momento de unión de la comunidad foiling, es decir, de todos los que se ocupan de este mundo. Es importante que hablemos de ello porque aún hay muchas páginas que escribir.

El foiling es innovación y ¡la vela ha alzado el vuelo!”

(Luca Rizzotti)

Los primeros experimentos concretos de foiling empiezan en 1936 y continúan en la marina militar en los años ‘50 y ‘60. Se empiezan a modificar las embarcaciones añadiendo unos extras parecidos a los de las hidroalas y ¡se consigue que vuelen!

La aleta en forma de ala, montada debajo del casco, que permite a las embarcaciones salir literalmente fuera del agua y volar sobre la superficie, se llama hydrofoil. Eliminando el roce del casco con el agua, las embarcaciones alcanzan velocidades incluso cuatro veces superiores a la del viento, garantizando rendimientos espectaculares.
Los barcos voladores


La clase moth es la piedra miliar de los barcos voladores: se trata de veleros pequeños y ligeros que se prestan a despegar. En los exordios, sin embargo, después del despegue los barcos zozobraban.

En 2004 el pluricampeón mundial y continental de esta disciplina Rohan Veal encuentra la forma ideal de dirigir el moth y se convierte en la segunda piedra miliar del foiling.

Una vez descubierto el barco y la forma de dirigirlo, arranca el progreso tecnológico. De los pequeños moth se evoluciona y se llega a los grandes AC72. De los barcos desplazables se había pasado, entre los años ‘70 y los ‘90, a los barcos planeadores. Ahora nace la tercera forma de navegar, los barcos voladores.

La tercera forma de navegar es el lema de la Foiling Week.

La Foiling Week nace de la pasión de Luca Rizzotti y Domenico Boffi. La idea es crear un encuentro entre deportistas de vela y diseñadores que involucre a todas las figuras, incluidos fabricantes y productores de materiales especiales. Un intercambio directo sobre el tema del foiling que, de la teoría de los ingenieros y los técnicos pase directamente a la experimentación de los deportistas de vela. La puesta en común es la base del funcionamiento de la Foiling Week. Por eso el formato prevé foros por la mañana y regatas por la tarde.
La competitividad es secundaria

El éxito de la Foiling Week se debe a la posibilidad de involucrar al público que puede ver y tocar de primera mano los barcos voladores.

Año tras año, Slam consolida su relación con The Foiling Week Global Tour y está al lado de campeones, embarcaciones y prestaciones en nada menos que cuatro citas. Tres momentos apasionantes para una experiencia que une hidrodinámica, vanguardia, talento y pasión: Fraglia Malcesine en el Lago de Garda, Sídney en Australia y Miami en Florida.
Foiling Week. La vela ha alzado el vuelo.